viernes, 26 de mayo de 2023

Antonio Colinas

El límite de lo inolvidable

Donde se cierra la espesura
de los castaños, los robles y el brezo
se abren los ojos del lobo.

Allí se cierra el bosque
y se abre la noche,
y se abre el firmamento,
los límites de lo invisible,
del no-ser.
¿O de un modo de ser siempre ignoto?
¿O acaso de ese ser
que un día nos hará vivir en plenitud
absoluta?

Donde se cierra la espesura
de los castaños, los robles y el brezo
se abren los ojos del lobo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario