Poema dedicado a su hijo Marcelo
Estas visitas que nos hacemos,
vos desde la muerte, yo
cerca de ahí, es la infancia que
pone un dedo sobre
el tiempo. ¿Por qué
al doblar una esquina encuentro
tu candor sorprendido?
¿El horror es una música extrema? ¿Las
casas de humo donde vivía
el fulgor que soñaste?
¿Tu soledad obediente
a leyes de fierro? La memoria
te trae a lo que nunca fuiste.
La muerte no comercia.
Tu saliva está fría y pesás
menos que mi deseo.
Marcelo Ariel Gelman y su esposa María Claudia García Irureta Goyena , embarazada de siete meses . Secuestrados y asesinados por la dictadura argentina . El poeta logró recuperar a su nieta años más tarde. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario