YA SABIA YO
Sí. Ya sabía yo que aquellas noches
de luna sin fulgor
de luna opaca
son temibles.
Se llega a cualquier ser humano
fácilmente
se conoce
su entrañable secreto
su gemido guardado
su nunca pronunciada palabra.
Se acaricia la piel bajo la piel
y la sangre escondida
dentro de la sangre.
Entonces, aquel hombre
- o aquella mujer - están desnudos
despojados, indefensos.
Y pueden ser heridos.
O adorados.
Sólo se necesita una noche de luna
pero de luna turbia:
una de esas noches
cuando las brujas tiemblan por temor
a los hombres.
lunes, 31 de mayo de 2021
Julia Prilutzky
domingo, 30 de mayo de 2021
Pedro Garcia Cabrera
sábado, 29 de mayo de 2021
Gabriel García Márquez
viernes, 28 de mayo de 2021
María Sanz
TE RECUERDO, HUMPHREY
Tanta nostalgia enhebra los momentos
Más cálidos. Me envuelve la penumbra
Junto al café y al cigarrillo. Suenan
Voces extrañas, susurrantes, mientras
El piano acompaña soledades
Escondidas. Los ojos
Más profundos que nunca me han mirado,
Los firmes movimientos
De unas manos, las frases poderosas
De un hombre están allí,
Vagando eternamente
Por la atmósfera turbia. Si no fuera
Porque esto no es el Rick´s ni Casablanca,
Juraría que he visto a Humphrey Bogart.
jueves, 27 de mayo de 2021
Antonio Gala
miércoles, 26 de mayo de 2021
Francisca Aguirre
Ítaca
"¿Y quién alguna vez no estuvo en Ítaca?
¿Quién no conoce su áspero panorama,
el anillo de mar que la comprime,
la austera intimidad que nos impone,
el silencio de suma que nos traza?
Ítaca nos resume como un libro,
nos acompaña hacia nosotros mismos,
nos descubre el sonido de la espera.
Porque la espera suena:
mantiene el eco de voces que se han ido.
Ítaca nos denuncia el latido de la vida,
nos hace cómplices de la distancia,
ciegos vigías de una senda
que se va haciendo sin nosotros,
que no podremos olvidar porque
no existe olvido para la ignorancia.
Es doloroso despertar un día
y contemplar el mar que nos abraza,
que nos unge de sal y nos bautiza como nuevos hijos.
Recordamos los días del vino compartido,
las palabras, no el eco;
las manos, no el diluido gesto.
Veo el mar que me cerca,
el vago azul por el que te has perdido,
compruebo el horizonte con avidez extenuada,
dejo a los ojos un momento
cumplir su hermoso oficio;
luego, vuelvo la espalda
y encamino mis pasos hacia Ítaca. "
martes, 25 de mayo de 2021
William Carlos Williams
The Red Wheelbarrow
cuánto
depende
de una carre
tilla roja
reluciente de
agua de lluvia
junto a blancas
gallinas
(Versión de Octavio Paz)
lunes, 24 de mayo de 2021
Amado Nervo
A una francesa
domingo, 23 de mayo de 2021
sábado, 22 de mayo de 2021
Ángel González
Ángel González, poeta español |
viernes, 21 de mayo de 2021
Alfonsina Storni
Un sol
Mi corazón es como un dios sin lengua,
mudo se está a la espera del milagro,
he amado mucho, todo amor fue magro,
que todo amor lo conocí con mengua.
He amado hasta llorar, hasta morirme.
Amé hasta odiar, amé hasta la locura,
pero yo espero algún amor-natura
capaz de renovarme y redimirme.
Amor que fructifique mi desierto
y me haga brotar ramas sensitivas,
soy una selva de raíces vivas,
sólo el follaje suele estarse muerto.
¿En dónde está quien mi deseo alienta?
¿Me empobreció a sus ojos el ramaje?
Vulgar estorbo, pálido follaje
distinto al tronco fiel que lo alimenta.
¿En dónde está el espíritu sombrío
de cuya opacidad brote la llama?
Ah, si mis mundos con su amor inflama
yo seré incontenible como un río.
¿En dónde está el que con su amor me envuelva?
Ha de traer su gran verdad sabida…
Hielo y más hielo recogí en la vida:
Yo necesito un sol que me disuelva.
jueves, 20 de mayo de 2021
Benjamín Prado
miércoles, 19 de mayo de 2021
Adam Zajajewski
LA MUCHACHA DE VEERMER
La Joven de la perla está en el museo Mauritshuis de La Haya. |
martes, 18 de mayo de 2021
Charles Bukowski
LO QUE HAY QUE SABER
Autorretrato de Van Gogh con oreja vendada (1889) Manuscrito del autor en bukowski.com |
lunes, 17 de mayo de 2021
Alicia Keys & John Mayer
domingo, 16 de mayo de 2021
Joaquín O. Giannuzzi
ANÉMONAS DE MATISSE
sometido a presión. Girando
sobre cada eje verde, se agrupan
en explosiones suaves
de rojo, violeta y blanco totalmente recientes
hacia un centro de ingrávidos objetos.
Dominación frontal, casi con nada y al descuido
en la hora indistinta, cuando todo
está bien. Alegrías
de agua liviana en un solo plano. La gracia más conforme
de estar allí como en el campo
de una dulce costumbre. Un poco ebria
la perspectiva asegura
la inestable sociedad de las cosas.
Pero amar el mundo, su abundante presente,
es obtener más luz:
esta celebración de la apariencia
que sin embargo se sostiene hasta el fin.
Anémonas en un vaso de terracota,1924 |
Piña y anémonas,1940 |
viernes, 14 de mayo de 2021
Sylvia Plath
jueves, 13 de mayo de 2021
Felix Grande
miércoles, 12 de mayo de 2021
José Vicente Piqueras
Juan Vicente Piqueras
ADVERBIOS DE LUGAR
Aquí es donde estoy yo. Esté donde esté
yo siempre estoy aquí donde me ves.
Esta casa, estas caras, estas cosas
cansan, porque aquí cansa.
Aquí hace sed de irse, sed de allí.
Pero allí es el lugar donde jamás podré estar,
donde yo soy imposible. Vaya adonde vaya,
allá donde yo llegue será aquí
y estaré ya esperándome a mí mismo
con un ramo de rosas iguales en la mano.
Ahí es tu aquí.
Ahí parece un grito porque es donde te duele.
Yo quiero estar ahí, donde estás tú,
tú aquí o, mejor, los dos allí, remotos, juntos
porque lo vivo es lo junto.
Ahí hay el amor que no hay aquí.
Esas cosas tocadas por tus manos,
eso que piensas, dices, callas, sueñas,
esos lugares donde estás sin mí,
eso deseo, eso necesito.
Y ser tu ahí, tu aliento intercalado.
Allí es la salvación, el espejismo
nacido de la sed de estar aquí.
Allí sí que seríamos felices,
donde tu aquí y mi ahí estarían juntos,
comerían perdices que no existen.
Allí es la lluvia aquella
que cae sobre este páramo sediento.
Allí es Jauja, el Dorado. No hay palabras
que puedan dar idea de aquel sitio.
Las palabras son éstas, nunca aquéllas.
Yo estoy aquí y tú ahí y allá nosotros cuándo.
Esto es piedra. Eso es seda. Aquello es mar.
Aquí, hogar imposible, íntima ausencia,
odiado domicilio, cárcel del cada día.
Ahí, calor del tú, tu vida mía,
tesoro de tu isla, aire de amor.
Allí, donde no estamos, llueve sobre la vida
que nunca será nuestra y nos aguarda.
Qui è dove io sono. Ovunque io sia
sono sempre qui dove mi vedi.
Questa casa, questi volti, queste cose
stancano, perché qui stanca.
Qui fa venire sete di andarsene, sete di lì.
Ma lì è il luogo dove non potrò mai essere,
dove io sono impossibile. Ovunque io vada,
il là dove arriverò diventerà qui
e starò già aspettando me stesso
con un mazzo di rose uguali in mano.
Là è il tuo qui.
Là sembra un grido perché è dove ti fa male.
Io voglio stare là, dove sei tu,
tu qui o, meglio, tutti e due lì, remoti, insieme
perché ciò che è vivo è ciò che è insieme.
Là c’è l’amore che non c’è qui.
Quelle cose toccate dalle tue mani,
quello che pensi, dici, taci, sogni,
quei luoghi dove sei senza di me,
quello desidero, di quello ho bisogno.
E l’essere tu là, il tuo alito interposto.
Laggiù è la salvezza, il miraggio
nato dalla sete di essere qui.
Laggiù sì che saremmo felici,
dove il tuo qui e il mio là sarebbero insieme,
avrebbero un lieto fine che non esiste.
Laggiù è la pioggia quella
che cade su questa landa assetata.
Laggiù è il paese di bengodi, l’El Dorado. Non ci sono parole
che possano dare l’idea di quel posto.
Le parole sono queste, mai quelle.
Io sono qui e tu là e laggiù noi quando.
Questo è pietra. Codesto è seta. Quello è mare.
Qui, focolare impossibile, intima assenza,
odiato domicilio, carcere dell’ogni giorno.
Là, calore del tu, la tua vita mia,
tesoro della tua isola, aria d’amore.
Lì, dove non siamo, piove sulla vita
che mai sarà nostra e ci attende.
(Traduzione di Roberta Buffi)