LAS VENTANAS
En estos cuartos sombríos, donde paso
días de tedio, voy vagando de un lado a otro
en pos de las ventanas. –Cada vez
que se abre una ventana es un consuelo–.
Mas no hay ventanas, o es que yo no puedo
encontrarlas. Y acaso, mejor que no lo haga.
Acaso la luz sea otra tiranía más. Quién sabe
qué inusitadas cosas vendrá a mostrarnos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario