lunes, 30 de mayo de 2016

Diego Ojeda

COSAS DE LA VIDA
 

Pino Ojeda


TE BUSQUÉ POR LOS SUEÑOS
Te busqué por la tierra, por largos
pasillos de seres. Te busqué por las noches,
por calles y sombras, por quietas esquinas
agudas. Te busqué por los días. Nadie
con carne y tacto me descubría tu nombre.
Te busqué por los bosques: altas miradas
rodaron por copas, por ramas, por quietas
palmeras, por viejos pinos lejanos. Pero nada,
nada tenía escrito tu nombre.
Te busqué por las hojas sobre vientres
de campos morenos. Te busqué por los trigos,
por valles y praderas de lirios, por montañas,
por fuentes. Por cada sendero oculto
iba gritando tu nombre.
Te busqué por los mares, por frágiles
barcas de marineros mojados. Te busqué
por algas, por peces, por rocas agudas,
por olas y anchas playas doradas.
Te busqué más abajo, en lo hondo, entre
viejas astillas de barcos remotos. Olvidadas
cartas marinas no decían tu nombre.
Te busqué por estrellas, por nubes,
por albas, por quietos celajes. Te busqué
por los aires, por la luna callejera,
por locas primaveras saltando.
Te busqué por el tiempo, por los siglos:
fríos cementerios no tenían tu nombre.
Te busqué por un signo, un signo de ave
y nadie, nadie podría encontrarte.
Te busqué por los sueños:
por los sueños, tú me estabas esperando.





 

domingo, 29 de mayo de 2016

Toni Morrison(USA)


Esta casa 

Esta casa ¿de quién es?
¿De quién es la noche que impide que entre
la luz?
Di, ¿a quién pertenece esta casa?
Mía no es.
Yo soñé otra, más acogedora, más luminosa,
con vistas a lagos que surcan barcos pintados,
a anchos campos abiertos ante mí como brazos.
Es extraña esta casa.
Sus sombras mienten.
Di, contesta, ¿por qué entra mi llave en la cerradura?


Volver  Lumen, Barcelona, 2013.

 

miércoles, 25 de mayo de 2016

Irene Sánchez Carrón

Declaración de amor

No creo ser, amor, lo que andas buscando
para tu día a día
ni los días que quedan por venir.

Porvenir no hay conmigo.

Sólo sé hacer poemas,
llenarte los armarios de quimeras, de hipérboles,
alimentarte el alma con aliteraciones,
poner todo perdido de rimas asonantes
y trastornar tu vida con multitud de hipérbatos.
Sólo sé hacer poemas,
vestirme de metáforas, de verso libre y blanco,
recogerme el cabello con dorados epítetos,
besar tus labios tiernos cerrando las vocales
y encabalgarme en ti abrupta
o suavemente.

No sé si soy, amor, lo que andas buscando.




lunes, 23 de mayo de 2016

Yukio Mishima(Japón)

Photo Credit: Tamotsu Yatō 

Icaro
¿Acaso pertenezco al cielo?
¿Por qué, de no ser así,
el Cielo me ha determinado
con su incesante mirada azul,
induciéndome a avanzar y
elevando mi mente
hasta las cúspides,
me ha lanzado
a las últimas alturas
por encima de lo humano?
¿Por qué, si el equilibrio
y el vuelo han sido estrictamente calculados
con la mejor razón,
de tal modo que por imperio de
lo correcto-
por qué, no obstante, la vehemencia
por el ascenso
parece tan cercana a la locura?
Nada me satisface. La novedad
terrena muere pronto.
Pero yo soy impulsado más alto y
más alto, en la inestabilidad, hasta
llegar al resplandor del sol.
¿Por qué esos rayos de la razón
me queman, me destruyen?
Las poblaciones
y los arroyos serpentinos,
allá abajo,
son tolerables
mientras más nos alejamos.
Porque quieren persuadirme,
me ruegan, me argumentan
para que ame a los humanos
cuando son tan insignificantes
desde lejos- si el amor
nunca será la meta,
ni lo ha sido; ¿Podría entonces
yo pertenecer al Cielo?
No envidio la libertad del ave
ni ansío la cómoda naturaleza,
tampoco busco en la nada
la salvación
ante la extraña aflicción
por las alturas; antes bien,
mientras más me elevo
entro a las inmensas profundidades
del Cielo azul.
Desprecio todas las joyas naturales
porque están muy lejanas
del supremo placer.
Me deslumbra el vértigo
incandescente
de las alas de cera.
¿O acaso, después de todo,
pertenezco a la tierra?
¿Y por qué, si fuera así,
la Tierra se afana
en hacerme caer, y
no me deja pensar ni sentir?
¿Por qué La Tierra, indolente y
blanda, me llama con golpes
de platillos de acero?
¿para mostrarme que soy blando?
La Naturaleza me lleva al hogar
para que yo caiga,
mas no para que vuele.
La Naturaleza pertenece
a las cosas ordinarias.
¿Qué es más genuino, desde lo alto,
que mi pasión imponderable?
¿El azul del Cielo
es nada más que un sueño?
¿La Tierra, a la que pertenecí,
tramó, a nombre de lo efímero,
la intoxicación blanca y caliente
que acaba en un solo momento
con las alas de cera?
El cielo me castigó
por no haber creído en mí,
o por haber creído
demasiado; me comió el ansia
por encontrar la lealtad, o por
soberbia creí saberlo todo.
¿Y sólo por que he querido volar
a los confines
de los mundos conocido y
desconocido? Mundos
que se hacen uno
en el fragmento azul
de una idea

domingo, 22 de mayo de 2016

Roberto Juarroz

El Corazón Más Plano de la Tierra 

El corazón más plano de la tierra,
el corazón más seco,
me mostró su ternura,
y yo tuve vergüenza de la mía.

Tuve vergüenza de los himnos largos,
de las constelaciones derramadas,
de los gestos nupciales y espumosos,
de las escarapelas del amor,
de los amaneceres desplomados.

Y también tuve miedo.

Miedo de las palabras que no cantan,
miedo de las imágenes que sobran
cuando tanto ser falta,
miedo de los roedores que se baten
en la iglesia vacía,
miedo de las habitaciones bautismales
que se llenan de águilas.

El corazón más plano de la tierra
me hizo aprender el salto en el abismo
de una sola mirada.

 

viernes, 20 de mayo de 2016

Aurora Luque

GENERACIÓN NOCILLA

Mi infancia son recuerdos
de un vaso de Nocilla.
Unas ondas viscosas de cacao,
la miga que resbala hacia el eje del libro.
(Mi abuela me advertía
que era bueno leer, que era muy bueno,
pero sin duda hablar también lo era).

Las tardes eran hondas, colosales,
muchísimo más duras
de lo que nunca habremos confesado.
La crisálida guarda cuerpos blandos.
Al salir, ya escudados, esperaba el futuro,
producto paralelo —qué ironía—
de calorías huecas,
indigesto y opaco,
industrial y marrón.





jueves, 19 de mayo de 2016

Amalia Bautista









DÉJATE
Déjate seducir por sus mordiscos,
siente en tu piel los pétalos de rosa
que saben ser sus labios cuando quiere
Escucha su llamada y sus silencio,
entrégate a sus gestos o a su ausencia
de gestos, y derrítete si puedes,
sin pudor, sin reparos ni vergüenza,
ante su invitación o ante la tuya.
Quema las normas de comportamiento,
despedaza la buena educación,
destroza las costumbres, rehabilita
por una noche al menos la locura.
Y un último detalle imprescindible
para que todo salga en condiciones:
procura que no sea tu marido.


miércoles, 18 de mayo de 2016

Jorge Riechmann

 Logitech pone a la venta
su Wireless Mouse M515
capaz de funcionar sin problemas sobre superficies blandas

como el sofá o la almohada

Con su sensor de detección de mano
el ratón solo funciona cuando se empieza a trabajar con él
y se apaga cuando no se utiliza

La carcasa inferior está sellada
para que el polvo del tejido no ensucie
ni bloquee los delicados componentes

Incluye un minúsculo receptor inalámbrico
y dos pilas de larga duración

La propaganda no dice nada
sobre la obsolescencia programada del producto:
pero cabe esperas que funcione sin problemas
al menos durante 48 meses

Cuesta 49'99 euros
(se esperan promociones)

Nuestros sangrientos días:
mercancías mimadas
seres vivos explotados

ellas y ellos 
prescindibles.











martes, 17 de mayo de 2016

Benjamín Prado

LIBRO DE FAMILIA

  Hoy que tú y yo
no somos todavía nosotros.
Hoy que aún
no está claro
qué busco
y dónde voy.
Hoy que esperas saber
lo único que importa
de alguien:
lo que nunca sería y lo que es.
Pregunta lo que quieras.
Te contaré mi historia,
día a día
y de principio a fin.

He aprendido a nadar en los libros de Conrad;
a huir en los poemas de Vallejo y Rimbaud.
Hablo cualquier idioma. Viví en todas las épocas.
Me llamaban Machado:
mi tumba está en Collioure.

Lo que sé de la muerte, me lo enseñó Quevedo.
Mi nombre es Anna Ajmátova;
mi nombre es Sylvia Plath.
He luchado con Frankenstein,
Drácula
y los franceses,
y naufragué con Gulliver y Robinson Crusoe.

Crucé a caballo América junto a Pablo Neruda.
Vine a España con Hemingway en la Guerra Civil.
He visto un hombre-lobo y una ballena blanca.
Compartí con Cervantes las mazmorras de Argel.

He jugado en la India con panteras que hablaban.
Vi en un bosque los tigres rojos de William Blake.
Dejé sobre la nieve pasos de hombre invisible.
He dormido en Comala, Oz y Nunca Jamás.

Viajé del Mississippi de Mark Twain hasta Ítaca,
la Isla del Tesoro,
la Esfinge de Gizeh...
He sido dios en Roma, héroe en Grecia y mendigo
en el Londres de Dickens y el Madrid de Galdós.

Mientras hablaba Góngora, existió Polifemo.
Borges puso en mis manos la esfera del Aleph.
He llevado en mi dedo el anillo de Tolkien.
Navegué siete mares al lado de Simbad.

Quise ser Isak Dinesen en las selvas de África;
en Moscú, Boris Pasternak y Lorca en Nueva York;
y un marinero rubio en brazos de Cernuda;
y el hombre que quisiera a Madame Bovary.

Si algo sé de la gente real, lo he aprendido
de Hamlet o Jane Eyre; Don Juan o Robin Hood;
Ligeia me dio el miedo; Ulises, la aventura;
Heathcliff me enseñó el odio; D'Artagnan, el valor.

En los versos de Alberti escuché a las sirenas.
Kafka me llevó a Praga, Victor Hugo a París.
He bajado al infierno con Dante, y con Ovidio
me he transformado en lluvia, en el eco, en laurel...

Sufro como Pavese; fumo al modo de Auden;
sonrío como Anne Sexton; bebo igual que Verlaine;
Rilke me hizo viajero y Paul Éluard de izquierdas;
Pessoa me ha enseñado a fingir que soy yo.

Ésa también ha sido mi familia,
como tú vas a serlo
de todos los que lean y no olviden
los poemas
                        que ahora
                                             escribo
                                                            para ti.


De Ya no es tarde, 2014


 Imagen relacionada

domingo, 15 de mayo de 2016

Andrés Neuman

LAS COSAS QUE NO HACEMOS
        
   Me gusta que no hagamos las cosas que no hacemos. Me gustan nuestros planes al despertar, cuando el día se sube a la cama como un gato de luz, y que no realizamos porque nos levantamos tarde por haberlos imaginado tanto. Me gusta la cosquilla que insinúan en nuestros músculos los ejercicios que enumeramos sin practicar, los gimnasios a los que nunca vamos, los hábitos saludables que invocamos como si, deseándolos, su resplandor nos alcanzase. Me gustan las guías de viaje que hojeas con esa atención que tanto te admiro, y cuyos monumentos, calles y museos no llegamos a pisar, fascinados frente a un café con leche. Me gustan los restaurantes a los que no acudimos, las luces de sus velas, el sabor por venir de sus platos. Me gusta cómo queda nuestra casa cuando la describimos con reformas, sus sorprendentes muebles, su ausencia de paredes, sus colores atrevidos. Me gustan las lenguas que quisiéramos hablar y soñamos con aprender el año próximo, mientras nos sonreímos bajo la ducha. Escucho de tus labios esos dulces idiomas hipotéticos, sus palabras me llenan de razones. Me gustan todos los propósitos, declarados o secretos, que incumplimos juntos. Eso es lo que prefiero de compartir la vida. La maravilla abierta en otra parte. Las cosas que no hacemos.
  

Hacerse el muerto

 

jueves, 12 de mayo de 2016

Matilde Alba Swann

SALVAJE
Salvaje como el viento, y arisca,
y triste a veces
como un rezo a la muerte,
y otras veces dichosa, y transparente,
y otras veces turbia
como esos charcos donde nadie bebe.
Naranja salvaje, verde agria,
y otras veces dulce,
roja por dentro
como tal vez fueran algunas
de las que rezuman en el monte
y nadie prueba.
Salvaje,
como mi cabello de batalla de insomnio,
como mis uñas mordidas como mis cejas rebeldes,
y otra vez tierna
con la voz ausente.
Salvaje,
como la garra en la que estrujaría mi corazón
cuando se encierra en víscera.
como la despavorida coraza de la selva.
Como el tigre en disentida mancha
tras la presa.
Como el asombro de Adán
ante el rostro espiral de la tormenta.
Como mi deseo si alguna vez se despertara
y no hallara la multitud en torno.
Como el gozo que entrecierra mis ojos
y abre las puertas de mi grito de par en par.
Como el dolor que me atraviesa
con sus crines mordidas por el fuego.
Con el infinito miedo de mis noches
poblándose de monstruos.
Como mi impulso frenético de golpear o o besar,
y a veces recogida como un murmullo al sol,
y a veces abandonada
y a veces abandonada y quieta
como la certeza del amor,
y silenciosa,
como la alcoba de mis horas
entreabriendo furtiva a la sorpresa.
Salvaje como mi audacia,
y otras veces miedosa y tímida y cubierta,
y otras veces
con la impudicia latiendo a flor de ropa.
Salvaje
deshaciéndome de mí misma,
y aullando y resonándome despedazada y estremecida
y tensa entre el lino dormido de las sábanas.
Fruta roída,
y otras veces intacta,
semilla, pulpa, zumo, toda guardándome
para la augusta nada.
Naranja salvaje, verde, agria,
con dolor de colores en la cáscara,
y algunas veces dulce,
increíble
y algunas veces,
cuando nadie me prueba,
miel y lágrima.



 espalda mujer - Buscar con Google:

miércoles, 11 de mayo de 2016

Charles Bukowski


Putrefacción

Últimamente
Me ronda este pensamiento
Que este país
Ha retrocedido
4 0 5 décadas
y que todo el
avance social
los buenos sentimientos de
una persona hacia otra
se han borrado
y se han reemplazado por la
vieja
intolerancia de siempre.

Más que nunca
Tenemos
Egoístas ansias de poder
Desprecio por el
Débil
El viejo
El pobre
El desvalido.

Estamos reemplazando necesidad con
Guerra
Salvación con
Esclavitud.

Hemos desperdiciado
Los logros
Nos hemos deteriorado
Deprisa.

Tenemos nuestra Bomba
Es nuestro miedo
Nuestra vergüenza
Y nuestra condena

Ahora
Se ha apoderado de nosotros
Algo tan triste
Que nos deja
Sin aliento
Y ni siquiera podemos
Llorar.




martes, 10 de mayo de 2016

Manuel Altolaguirre

TE QUIERO
Un lago en una isla
eso es tu amor por mí,
y mi amor te rodea
como un inmenso mar
de silencios azules;
pero tienen también
tus grandezas ocultas.
Soy un niño de sal
sobre tu falda;
me sostienen tus prados
submarinos,
eres frondosa cumbre,
eminencia visible
de tu tierra profunda.
Me enriquecen los ríos,
y tu amor, ese lago
corazón de la isla,
es la fuente de todas
las líquidas comarcas.
Te haces querer. Te quiero.
Mira mis blancas olas.

 

lunes, 9 de mayo de 2016

Emily Dickinson


"Faith" is a fine invention
185

"Faith" is a fine invention
When Gentlemen can see—
But Microscopes are prudent
In an Emergency. 









Emily Dickinson is a writer who expresses my sense of loneliness and simple spirituality.:

             






  (185)

           La "Fe" es toda una invención
        Para el Hombre con conciencia-
        Los Microscopios son buenos
        En un caso de Emergencia.

viernes, 6 de mayo de 2016

Federico García Lorca

Casida de la mujer tendida
Verte desnuda es recordar la Tierra.
La Tierra lisa, limpia de caballos.
La Tierra sin un junco, forma pura
cerrada al porvenir: confín de plata.

Verte desnuda es comprender el ansia
de la lluvia que busca débil talle
o la fiebre del mar de inmenso rostro
sin encontrar la luz de su mejilla.

La sangre sonará por las alcobas
y vendrá con espada fulgurante,
pero tú no sabrás dónde se ocultan
el corazón de sapo o la violeta.

Tu vientre es una lucha de raíces,
tus labios son un alba sin contorno,
bajo las rosas tibias de la cama
los muertos gimen esperando turno.


 Flores y Palabras: Ramon Casas i Carbó 2:



jueves, 5 de mayo de 2016

En el set 8

36
Harry Potter
29
Tiburón
27
María Antonieta
22
Godzilla
21
Frankenstein
12
Kill Bill
09
Titanic
08
Ben-Hur
04
El resplandor
01
El imperio contrataca
Steven Spielberg & Drew Barrimore en el set de E.T.
ET
Scorsese and Michelle Pfeiffer obehind the scenes of The Age of Innocence
La edad de la inocencia
Rutger Hauer and Harrison Ford on the set of "Blade Runner".
Blade Runner
farleysgranger:  Costume designer Irene Sharaff with Elizabeth Taylor on the set of Cleopatra (1963).
Cleopatra
Tim Burton, Johnny Depp, and Sarah Jessica Parker on the set of Ed Wood (1994)
Ed Wood
Marilyn Monroe photographed by Richard Miller signing autographs for fans on the set of Some Like It Hot, 1959.
Con faldas y a lo loco
Quentin Tarantino, Bruce Willis and Maria de Medeiros on the set of Pulp Fiction
Pulp fiction
Katharine Hepburn and Spencer Tracy on the set of Guess Who’s Coming to Dinner. Stanley Kramer. 1967.
Adivina quién viene esta noche
Cary Grant and Alfred Hitchcock on the set of ‘North by Northwest’, 1959.
Con la muerte en los talones
Meg Ryan and director Rob Reiner on the set of "When Harry Met Sally" ~ 1989
Cuando Harry encontró a Sally



Vivien Leigh on the set of Gone with the Wind c.1939 .
Lo que el viento se llevó







miércoles, 4 de mayo de 2016

Alejandra Pizarnik

A veces también se me acaban
las sonrisas para ti,
a veces también se me acaban
las ganas de escribirte.
Pero te amo, ojalá lo entiendas,
siempre te amo,
pero a veces mis abrazos no tienen calor
y mi boca no sabe que decir…
Pero te amo, siempre te amo,
cuando no te convengo,
cuando no me convienes,
cuando no me soportas,
cuando te odio,
te amo.

 

Biblio Letras : Alejandra Pizarnik (1936- 1972):

martes, 3 de mayo de 2016

Silvia Ugidos(España)

POSIBLE AUTORRETRATO
 
Yo siempre quise ser una mujer de bien,
ser alguien de provecho, valiente, emprendedora,
mesurada en las fobias, estable en los afectos,
brillante en los estudios, por poner un ejemplo.

Yo siempre quise ser una mujer de bien
y tenerlos a todos felices y contentos,
a mis padres y amigos, a Fulano y Mengano,
a Diestro y a Siniestro…

Pero hay alguien en mí que todo lo estropea,
que tuerce los caminos, equivoca las cosas,
desbarata mis planes, incumple mis promesas.
Alguien que pisa antes que yo sobre mis huellas.

En fin, visto lo visto, ya lo dicen mis padres:
«a este paso, hija mía, no llegarás a nada».
Está bien, os lo debo, lo siento, lo confieso:
aludiendo a un anuncio, no soy como Farala.

Soñadora, insegura, mitómana, algo vaga,
con vocación de hormiga y verano de cigarra,
contradictoria y harta de conciliar extremos
en mi defensa alego
que siempre quise ser una mujer de bien
pero que en su defecto
soy, en el buen sentido de la palabra, mala.




lunes, 2 de mayo de 2016

Antílopez

 Musa en paro busca poeta 






ANUNCIOS POR PALABRAS
I

POETA, sin pretensiones
y con una edad cualquiera,
pero joven,
ya con pocas ilusiones
–pues teme que cuanto espera
se lo roben–,
quisiera volverte a ver,
pasar contigo unos días
y sus noches,
empezarte a conocer
otra vez sin cacerías
ni reproches.

Luis García Montero

domingo, 1 de mayo de 2016

Alejandro Jodorowsky

16
La última odisea

Partieron en busca de la Verdad. Encontraron a quien los estaba soñando.


El tesoro de la sombra (2003)